¿Cuantxs hemos escuchado, o dicho, la palabra «consolador»?
Pero, ¿por qué consolador? ¿a quién estamos consolando? ¿y de qué lx estamos consolando?
Vamos a irnos siglos atrás, muchísimos siglos atrás. Resulta que los griegos descubrieron una «nueva enfermedad», esta solo afectaba a las «mujeres» (personas con vulvaginas), su nombre era «Histeria Femenina» y sus principales síntomas eran: tener fantasías sexuales, mucho deseo sexual, irritabilidad, ansiedad y «tendencia de las mujeres a causar problemas».
No, no es una broma, en serio era una enfermedad. Aunque si analizamos un poco, muchxs actualmente tendríamos «Histeria Femenina» crónica.
¡Pero bueno! con el tiempo la tan novedosa «enfermedad» se extendió por los continentes hasta llegar a Estados Unidos, de pronto se volvió tan conocida y aceptada que la denominaron como una «plaga peligrosa para las mujeres», así que tenían que descubrir una cura y ¿cuál fue? nada mas y nada menos que: ¡masajes genitales!
Sí, se dice que la cura era realizar un masaje en la zona genital de las «mujeres», principalmente en el clítoris, hasta provocar un orgasmo, esto liberaría a las «mujeres» de la «Histeria». Estos masajes fueron el detonante para la creación del primer «consolador», artefacto que agilizaría la cura de la «Histeria».
En 1952 la «Histeria Femenina» se descalificó como enfermedad, sin embargo la palabra «consolador» siguió siendo utilizada hasta la actualidad. Detrás de esta hay un sentido de «aliviar la pena o aflicción de alguien», «aliviar la soledad», «aliviar el dolor emocional», «aliviar la ausencia de una persona con pene».
En el 2014 el concepto de “consolador” se cambió en el diccionario a: “aparato, generalmente en forma de pene, utilizado para la estimulación sexual”, sin embargo su pasado tiene una huella y connotación machista que debemos erradicar.
Las personas con vulvaginas no necesitan ser «consoladxs». Así que podemos cambiar esta palabra por: juguete sexual, dildo (su nombre en inglés), falo, pene de plástico…o podés ponerle un nombre al tuyo, de esta forma le das un toque más personalizado a tus juguetes.